Al pensar en Ecuador, lo primero que viene a la mente podrían ser las Islas Galápagos o la Amazonía. Pero al mismo tiempo, también es un destino perfecto para los amantes del senderismo. En los Andes de Ecuador se encuentran numerosas montañas y volcanes que se pueden escalar, adecuados no solo para profesionales, sino también para principiantes; en otras palabras: ¡perfecto para mí!
Rucu Pinchincha
Si estás en Quito, una excursión perfecta para tachar una montaña de tu lista de senderismo es el Rucu Pichincha (4,700 m / 15,420 pies). Toma el TeleferiQo hasta los 4,000 m (13,124 pies) y disfruta de la increíble vista de la capital más alta del mundo a tus pies. Respira profundamente y prepárate mentalmente para las siguientes tres a cuatro horas, porque en el camino te podrías preguntar por qué estás haciendo esto. La respuesta se revela cuando llegas a la cima: lo haces por la adrenalina, por la emoción, por ese sentimiento indescriptible de alegría y orgullo. Para algunos, es solo un paseo, una caminata por una bonita montaña, pero para mí fue una caminata agotadora que me dejó dormido a las 8 pm esa misma noche. A mi defensa debo añadir que era mi primera caminata a tal altitud.
El Corazón
La siguiente aventura de senderismo me llevó a un volcán llamado El Corazón (4,800 m / 15,748 pies), ubicado a unas hora al sur de Quito, en la Cordillera Occidental de los Andes de Ecuador. Para llegar a la cima, tienes que superar unos 1,500 m / 4,920 pies de altitud. La caminata te lleva primero a través de un hermoso páramo hasta llegar a un punto donde debes comenzar a escalar un poco. Lo cual no es nada fácil considerando lo frías y adormecidas que están tus manos. Debido a mis descansos cada cinco minutos, me tomó un buen rato llegar a la cima (definitivamente lo culpo a la falta de aire a esa altitud, no a mi falta de resistencia). Cuando estuve de pie en la cima de la montaña, la misma sensación increíble que la vez anterior me invadió.
Iliniza Norte
Sin embargo, lo más destacado de mi experiencia montañera en Ecuador fue la caminata hasta la cima del volcán Iliniza Norte (5,126 m / 16,816 pies), ya que desde hace unos meses mi meta había sido, alguna vez en mi vida, caminar a más de 5,000 m / 16,404 pies. ¡Misión cumplida! Me sentí más feliz de lo que podría haber imaginado antes, cuando finalmente estaba de pie en la cima – aunque estar de pie era bastante difícil porque el viento soplaba con fuerza. Llegar allí también fue bastante complicado. Algunas partes del camino son más o menos arenosas, así que das dos pasos, pero resbalas hacia atrás uno. Definitivamente haz esta caminata con un guía. En tu camino hacia arriba, así como hacia abajo, es fácil perderse, y también es tranquilizador tener a alguien que te asegure con una cuerda, porque a veces el camino es realmente empinado y es difícil mantener el equilibrio.
