Lagartija de lava Galápagos

Lagartija de Lava de Galapagos

Otro animal que abunda en las Islas Galápagos, situadas al oeste de Ecuador, es la Lagartija de lava.
El lagarto de lava de Galápagos es también una especie típica del archipiélago, que se encuentra principalmente en las islas grandes. Mientras que las especies de lagartija, iguana terrestre e iguana marina son esporádicas, ésta es la más común. En total, hay siete especies diferentes de lagartija de lava que habitan en las Galápagos.

Seis de las especies se encuentran en islas específicas, pero una especie habita en diez islas de Galápagos. Su cuerpo tiene una longitud de sólo 5-10 cm, pero la parte de la cola es tan larga o incluso más que su cuerpo, por lo que su tamaño total es de unos 25 cm. Esto hace que la lagartija de lava sea aproximadamente un metro más pequeño que la iguana marina y terrestre. El tamaño también depende del sexo de los animales y varía de una isla a otra.

Para protegerse y distraer a los enemigos, la iguana de cola de cuña tiene una estrategia que le permite huir de situaciones peligrosas. En caso de amenaza, la lagartija de las Galápagos puede dejar caer su cola, lo que distrae al animal hostil y le permite aprovechar la oportunidad y escapar.

Lagartija de lava de Galápagos.

Los machos suelen tener manchas entre el gris azulado y el marrón, con un contorno negro en el cuello, mientras que las hembras no tienen manchas o las tienen muy claras. Las lagartijas de lava negras son una rareza, así que hay que tener suerte para ver uno.

Además, los machos están marcados con una raya clara alrededor del cuello y están marcados con una cresta que atraviesa la espalda. A diferencia de los machos, las hembras carecen de estas dos características. Sin embargo, sí poseen una especie de “mancha en la mejilla” de color salmón, naranja o rojo ladrillo. Se extiende desde la base de las patas delanteras y el cuello por la cara hasta el ojo.

Lagartija de lava de Galápagos

En caso de fluctuaciones bruscas de temperatura o de posible peligro, la lagartija de lava también cambia de color. Cuando se ve amenazado, el color se adapta al entorno, proporcionando a la iguana de cola cuneiforme un camuflaje y una protección óptimos.

HÁBITAT, DIETA Y REPRODUCCIÓN

La lagartija de lava de Galápagos se puede encontrar durante todo el año y se encuentra principalmente en las islas de Isabela, Santa Cruz, Fernandina, Santiago y Santa Fe. Es principalmente diurno, con menos actividad durante el calor del mediodía, y suele encontrarse en rocas cálidas cerca de la costa. También prefiere alimentarse de insectos, arañas, larvas, hormigas y escarabajos. Esta dieta ayuda a prevenir y controlar las plagas. En algunos casos, también trepan a los árboles y consumen hojas recién brotadas. Las iguanas de cola en cuña también se comen entre sí en algunos casos, lo que las convierte en caníbales.

Los machos defienden su territorio compitiendo con otros lagartos de lava macho. Para competir, las iguanas de cola de cuña realizan movimientos que recuerdan a las flexiones de pecho. El trasfondo de este comportamiento es parecer lo más fuerte y disuasorio posible, para que la largatija de lava contraria huya voluntariamente. Sin embargo, si no queda claro en las flexiones qué lagarto de lava, es el más fuerte, o si ninguna de las iguanas se retira voluntariamente, puede producirse una pelea. Los mordiscos y los golpes con la cola son habituales en un combate de este tipo. Para ver un duelo, no es necesario adentrarse en zonas recortadas, ya que a menudo tienen lugar en objetos elevados, como paredes, postes o estatuas, y por tanto son fácilmente visibles para los humanos.

Lagartija de lava de Galápagos amarilla y roja, con puntos negros

Antes de aparearse, los machos agarran a las hembras por la nuca o la espalda y, a veces, las llevan a distancias cortas. Las hembras ponen entre uno y seis huevos blancos del tamaño de un guisante. En la isla Santa Cruz de Galápagos, lo más habitual es que pongan dos huevos en madrigueras excavadas entre mayo y junio. Las crías de largatijas de lava tardan tres meses en salir de los pequeños huevos.

EN PELIGRO

Lamentablemente, se sabe poco sobre la situación actual de peligro de esta especie.
Sin embargo, su presencia es limitada y, por tanto, puede contarse entre las “especies casi amenazadas”. También es cierto que los animales no están en el fondo de la cadena alimentaria y que, sobre todo, los gatos domésticos y las ratas suponen una amenaza para ellos. Al igual que en el caso de las iguanas marinas, el fenómeno climático “El Niño”, que describe cambios repentinos en el tiempo y se intensifica con el calentamiento global, es una amenaza para la lagartija de lava.

Lagartija de Lava de Galápagos

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